Los poetas de 1º

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"ALMA DE POETAS"

¡Felices vacaciones y felices lecturas! Leed, leed, leed...

Vuestras crónicas sobre la visita de Ana Alcolea

VISITA DE ANA ALCOLEA AL I.E.S TORRENTE BALLESTER

UNA VISITA ESPERADA

Tras las apasionantes aventuras que ha relatado en sus libros, Ana Alcolea va al Instituto Gonzalo Torrente Ballester a comentar una de sus novelas más significativas.

(Sergio Ocaña y Verónica Pardo)

Tras ser presentada por dos alumnos, Ana Alcolea empezó contando Romeo y Julieta Shakespeare, con el motivo de conectar a  los escritores y sus lectores.

Ana Alcolea, natural de Zaragoza, nació en 1962. Aparte de voz literaria, ella fue jugadora de hockey y profesora de gimnasia rítmica.

Ella explica: “para el deporte se necesita disciplina y eso ayuda para la Literatura”.

La escritora ha ganado la VIII edición del premio Anaya de Literatura Infantil y Juvenil, dedicado ese año al ámbito juvenil, con la obra La noche más oscura. Ana confesó que era la tercera vez que inscribía al premio Anaya y le hizo mucha ilusión, “a la tercera va la vencida”.

Pronuncia frecuentes charlas en colegios e institutos y publica artículos didácticos sobre teatro (sobre todo del clásico español) y sobre Lengua y Literatura, ya que ahora no trabaja como profesora.

Pasa largas temporadas en Noruega .Le gusta viajar y siempre lo hace con un cuaderno en el que toma notas y apuntes que luego recrea en sus novelas.

El medallón perdido se lo dedico a su primo, que falleció en un accidente de avioneta; éste , con su hermano , le regalaron un colgante de un colmillo de jaguar que ellos mismos le arrancaron.“El colmillo representa su fuerza y su poder” explicó Alcolea.

A los alumnos les ha gustado mucho la charla, y piensan que Ana Alcolea es una persona agradable y comprometida con la verdad de la Literatura. Los alumnos esperan volver a coincidir con ella aunque siempre “estarán conectados a través de sus libros”, como ella afirmó.

Ana Alcolea posa con los alumnos de 1º B de ESO

LA MARAVILLOSA VISITA DE LA ESCRITORA DE LITERATURA INFANTIL Y JUVENIL, ANA ALCOLEA, AL GONZALO TORRENTE BALLESTER

UNA GRATA SORPRESA

(Sonia Guibaja, Nicolás Matías, Marcos López, Alejandra Martínez y Daniel Fernández)

El jueves 12 de mayo, Ana Alcolea visitó a los alumnos de 1º de ESO del Instituto Gonzalo Torrente Ballester, de la localidad madrileña de San Sebastián de los Reyes.

Fue a darles una charla sobre su vida personal y profesional, porque los alumnos habían leído uno de sus libros, El medallón perdido y les pareció muy interesante conocerla y saber sobre ella.

En honor a Shakespeare contó la trágica historia de Romeo y Julieta. Ana Alcolea dijo: "Cuando Julieta despertó y vio a Romeo muerto, para estar con su amado, se clavó un puñal en el corazón".

Le hicieron muchas preguntas y ella las contestó encantada. Y, para finalizar la visita, se hizo fotos con los alumnos y les firmó los libro.

Firma de libros

Ana, de niña, hizo hockey y, de mayor, se hizo entrenadora de gimnasia rítmica, y esa disciplina que requiere la gimnasia la emplea a la hora de escribir y de crear. Afirmó que el libro lo crean el escritor y el lector mediante una conexión que tienen a través de la lectura. También afirmó que el escritor, cuando crea, se inspira en experiencias propias.

Ana enseñó a los alumnos en medallón en el que estaba basado el relato de su novela. Les propuso que se imaginarán a Julieta y al medallón. ¡Todos los prototipos de Julieta y del medallón eran diferentes!

A los alumnos, la escritora les pareció una persona amable, que daba mucha cancha a las bromas, y se sentía muy cómoda explicando su vida y su libro. Debe ser porque fue profesora.

Las alumnas posan con sus ejemplares firmados

  

EL MEDALLÓN PERDIDO VISITA EL TORRENTE

(Adrián Fernández, Ángel Chiclana, María Franco,y Javier Aguirre)

El jueves 12 de mayo de 2016 a las 9:30, la escritora Ana Alcolea visitó el salón de actos del IES Gonzalo Torrente Ballester, en San Sebastián de los Reyes porque sus lectores quisieron que viniese a hablar del libro que se habían leído, (El medallón perdido), de su vida personal y de su carrera literaria.

La escritora fue presentada por los compañeros Adrián Fernández Cano y Ángel Chiclana Fernández, de 1ºB ESO, que hablaron también de su vida y sus gustos. A la escritora le agradó mucho esa investigación.

Habló sobre la obra de teatro Romeo y Julieta, que resumió. También sobre El ingenioso hidalgo Don Quijote de la Mancha, libro en el que se inspiró para el juego de espejos que hizo en una parte de El medallón perdido, porque en los dos libros, los protagonistas se encuentran con el mismo libro en el que aparecen. El motivo por el que habló de estas obras literarias es que este 2016, se cumplen cuatrocientos años de la muerte de los escritores Shakespeare y Miguel de Cervantes Saavedra.

Ana Alcolea contó que El medallón perdido estaba basado en hechos reales, ya que un día recibió la llamada de uno de sus primos diciendo que su otro primo había fallecido en un accidente de avioneta, y lo sintió tanto que decidió expresarlo escribiendo un libro.

También relató una anécdota muy emocionante, y es que ella había escrito un libro malísimo, tanto que ni siquiera piensa editarlo, incluso cualquier día se plantearía borrarlo. Según su teoría, los libros se hacen sintiéndolos, con experiencias vividas, y si no se sienten, no se expresa nada a los lectores.

En una ocasión, durante la charla, Ana Alcolea se llegó a quitar la chaqueta negra con la que iba vestida, pero al final se la volvió a poner porque las temperaturas en el salón de actos eran un poco bajas.

Ana hizo alarde de simpatía

Su actual editora de Anaya, casualmente, es una antigua alumna suya que tuvo cuando era profesora de secundaria. La escritora aseguró que le había hecho mucha ilusión volverse a encontrar con una persona del pasado. Antes ella había sido la que corregía los exámenes de su editora; y ahora sucedía al revés.

Ana Alcolea ganó el VIII Premio Anaya, después de haber quedado dos veces finalista. Según dijo: “A la tercera va la vencida”. Lo obtuvo con el libro La noche más oscura, que escribió en poco más de un mes, ya que empezó el 18 de agosto, y lo entregó el 30 de septiembre.

Demostró a sus lectores que la imaginación de una persona no es la misma que la de otra, y lo hizo preguntando cómo se imaginaban el medallón  del libro. Hubo diversas opiniones.

Ana, cuando era más joven, fue entrenadora de gimnasia rítmica, y con su grupo ganó algún premio que otro.

Adrián Fernández Cano, compañero de 1ºB de ESO, le preguntó: “¿Algo o alguien te ha inspirado para ser escritora?” Y ella contestó que de pequeña, en 6º de primaria tuvo una profesora que hizo que se enamorase de la Literatura junto con otra profesora de 2º de Bachillerato. Sin embargo, la pregunta que brilló sobre las demás fue la que hizo Ángel Chiclana Fernández, también de 1º B, que la dejó impactada y, al mismo tiempo, preocupada: “¿Por qué hasta 2009 escribes libros con títulos alegres y a partir de 2010 ya suenan más melancólicos?” Ana Alcolea no supo qué contestar, ni ella misma se había dado cuenta de ese minúsculo detalle, a pesar de lo importantes que son los títulos en los libros, ya que estos, aunque no lo parezca, nos brindan mucha información.

Un divertido selfie

Ana Alcolea trajo preparada una presentación digital en su ordenador sobre el ritual del pwiti, pero no se pudo ver porque el proyector no funcionaba correctamente.

La escritora, en principio, iba a venir el miércoles 27 de abril de 2016, pero su padre enfermó, y esa visita se atrasó al viernes 13 de mayo. Finalmente, se adelantó un día.

Al final de la charla, firmó libros a sus lectores con un lápiz muy llamativo, con muchos colores, y allí se hizo unas fotos y selfies con ellos.

Llamó la atención su firma, por su rareza. Con la dedicatoria, muy simple.

Ha sido una visita muy amena, igual que es Ana Alcolea.